2020 NO.29
MenuLos lazos del corazón de Japón
Los lazos de ornamentos afectuosos
Obi-musubi (nudos de fajas obi )
Con la llegada del siglo XVIII, el número de habitantes en Edo (hoy Tokio) aumentó a un millón, transformándose en una de las principales ciudades consumidoras del mundo. En un mundo pacífico y sin guerras, los residentes, que empezaron a vivir cómodamente, promovieron la cultura a medida que la economía experimentaba un notable desarrollo.
Por esa época también se puso de moda obi-musubi. El obi, que solo había servido para atar el kimono, un atuendo folklórico japonés hasta ese entonces, evolucionó en una faja más amplia y larga, convirtiéndose en un accesorio no solo funcional, sino también elegante a la vista. Se crearon fajas obi más sofisticadas con una diversidad de tejidos, colores y patrones, y eso dio origen a nuevas tendencias para sujetarlas.
Por esa época también prevalecía un sistema de clases sociales que se basaba en la ocupación: samuráis, granjeros, artesanos y comerciantes, y había determinados métodos para atar el
Según se dice, en la actualidad hay más de 100 métodos de obi-musubi, pero la mayoría de ellos son variaciones de los nudos básicos que nacieron en la era Edo (1603-1868). Esta cultura se ha legado sin cesar a lo largo de las generaciones.