2025 NO.38
MenuLos japoneses y el espacio
La tecnología japonesa contribuye a los progresos en el espacio
La tecnología espacial japonesa tiene como objetivo facilitar el uso pacífico del espacio exterior. Sigue evolucionando y abordando desafíos globales, como los desechos espaciales y el cambio climático.

StriX es un satélite SAR pequeño y ligero de 100 kg, aproximadamente una décima parte del tamaño de un satélite grande. En la segunda mitad de la década de 2020, 30 de estos satélites SAR formarán una constelación.
Pequeños satélites que reúnen datos para ayudar a resolver el cambio climático y otros problemas globales
Los satélites con radar de apertura sintética (SAR) utilizan microondas para registrar las condiciones relacionadas con las estructuras de la superficie terrestre. Con la capacidad de registrar grandes áreas en alta resolución, independientemente de las condiciones meteorológicas o la hora del día, estos satélites se han utilizado recientemente para determinar la magnitud de los desastres naturales y evaluar los riesgos del cambio climático y de la superficie terrestre.
Synspective Inc. ha desarrollado una tecnología de producción en serie de bajo costo para fabricar pequeños satélites SAR, de hasta una décima parte del peso de los grandes satélites convencionales. Estos satélites tienen una antena plegable que cuando se despliega mide lo mismo que una antena de un satélite grande, están equipados con un amplificador de 1 kw de potencia y ofrecen un excelente control térmico que mantiene el satélite dentro de un rango de temperatura tolerable, lo que los hace menos propensos a tener averías durante la órbita. Por medio de la construcción de una constelación de satélites, un sistema en el cual muchos satélites se lanzan para que se sitúen en la misma órbita y funcionen de manera coordinada para comunicarse de manera simultánea y observar una extensa área, Synspective ha estado trabajando para crear un sistema de múltiples satélites que pueden recoger datos de todo el planeta en tiempo casi real. La empresa ha acumulado una amplia experiencia en el suministro de datos sobre daños causados por terremotos e inundaciones a agencias gubernamentales y otras entidades en Japón, y además es capaz de anticipar daños, a partir de los datos obtenidos en casos de hudimientos de terrenos tanto en Japón como en el extranjero. Synspective se está expandiendo por Asia y Norteamérica, y tiene previsto abordar los retos que plantea la resolución de problemas específicos de esas regiones.
Imagen infográfica de un pequeño satélite SAR registrando datos. El satélite transmite microondas y luego recibe las microondas reflejadas de vuelta desde la superficie de la Tierra. Las microondas pueden penetrar la capa de nubes, lo que permite registrar datos en cualquier condición climática, de día o de noche.
Preparativos para proyectos de limpieza espacial
Se estima que más de 100 millones de piezas de chatarra espacial orbitan alrededor de la Tierra, incluidos restos de satélites y cohetes fuera de servicio que podrían causar grandes daños si chocan con satélites o estaciones espaciales. Astroscale Inc. ha emprendido una misión sumamente inusual en un intento de eliminar los desechos que dificultan la exploración espacial. Lanzado en 2024, el satélite ADRAS-J se está acercando a los desechos en órbita que se mueven a velocidades extremadamente altas de 7 a 8 kilómetros por segundo. Inicialmente a varios miles de kilómetros de distancia entre ellos, se ha logrado reducir la distancia a 15 metros, entre otras cosas. Astroscale avanza rápidamente con el desarrollo de ADRAS-J2, un satélite capaz de eliminar fragmentos de desechos de hasta 11 metros de longitud.
Impulsando los programas espaciales y el desarrollo de recursos humanos en Asia
La Universidad de Hokkaido, situada en el norte de Japón, es una de las pocas universidades del mundo en las que los investigadores del departamento de ingeniería, que se dedican al desarrollo de cohetes y otros equipos, compiten amistosamente con los investigadores en el campo del desarrollo de instrumentos ópticos para ser instalados en satélites y de los departamentos de ciencias, agricultura y pesca, que analizan los datos registrados por satélites y vehículos espaciales. El Centro de Misiones Espaciales, que forma parte del Instituto de Innovaciones Integradas de la Universidad de Hokkaido, colabora con empresas privadas y universidades cercanas en diversas misiones espaciales. El centro ha desarrollado una serie de nuevas tecnologías, entre las que se incluyen sistemas de motores para pequeños satélites y nanosatélites de 50 kg.
El Centro de Misiones Espaciales también ha trabajado desde 2015 con Filipinas en la creación del primer satélite del país, y ha ayudado a su lanzamiento por parte de la Agencia Espacial de Filipinas (PhilSA). Estos esfuerzos se han extendido a otros países en el Sudeste Asiático, y se ha establecido el Consorcio Asiático de Microsatélites con la participación de nueve países de Asia, bajo el liderazgo de la Universidad de Hokkaido y la Universidad de Tohoku, gracias a lo cual se está formando la base de una red asiática para el desarrollo espacial en Hokkaido.
El motor de retropropulsión híbrido para pequeños satélites desarrollado por el Laboratorio de Utilización Espacial de la Universidad de Hokkaido es especialmente útil para lanzamientos de múltiples satélites pequeños en un solo cohete que se colocan individualmente en sus respectivas órbitas de destino. (Foto: Laboratorio de Utilización Espacial de la Universidad de Hokkaido)