Reportaje Especial*
En Kioto la Vida es un Arte 4
Vivir y Trabajar sin Estrés
Ishikawa Miyoko
Pintora de Cerámica Kiyomizu
|
![Image](../../images/feature/21_1.jpg) |
Las líneas de cada recipiente van surgiendo una por una de las manos de Ishikawa.
Las piezas que se muestran aquí han sido cocidas una vez y recibirán una capa de barniz.
|
|
En este paseo se podría esperar ver a algún vendedor de productos como hortalizas o tofu. Es tan estrecho que difícilmente puede atravesarlo un coche sin sufrir ningún rasguño entre las sucesivas casas de dos pisos en todo su recorrido. En una de estas casas se encuentra el taller de Ishikawa Miyoko, pintora de cerámica Kiyomizu.
Nos asegura que no tiene que cerrar la puerta con llave cuando sale a la calle. Seguro que algún vecino le preguntará a dónde va. Y al volver, seguro que también habrá alguien diciéndole: O-kaeri (Es un placer verla de vuelta).
Cuando era más joven, no me gustaba relacionarme de esta manera con los vecinos, pero ahora considero un placer que haya alguien que se preocupe de tí, sintiéndolos cercanos sin estar demasiado pegados a tí. En el caso de que ocurriera algo, todos estamos seguros de poder apoyarnos en alguien. En Kioto este tipo de relación entre vecinos es la norma. Y en realidad hace la vida placentera.
Ishikawa maneja la pequeña brocha mientras continúa hablando. Diseña un pequeño dibujo en una copa recién cocida.
Nos comenta que sólo dibuja diseños komon (ver fotografías). Siempre me han gustado las antigüedades y desde hace algunos años vengo coleccionando porcelanas, aunque sólo piezas con diseños komon. Cada vez me gustan más y he acabado haciéndolas yo misma. Escuché que el dueño de un horno estaba buscando una pintora y rápidamente fui a hablar con él para decirle que estaba dispuesta a trabajar gratis durante un año. En aquel momento era una aprendiz.
Hay dos tipos de cerámica Kiyomizu: porcelana y barro. Ambos se hacen en el torno del ceramista y ambos también son decorados a mano. Cada artesano se implica en sólo uno de los procesos de creación. El trabajo de Ishikawa lo lleva haciendo desde hace 30 años es decorar la cerámica con los pinceles. En la actualidad, es tan reconocida que muchos clientes demandan los dibujos hechos por ella.
El trabajo es meticuloso. Me gusta pasear por la montaña, y dibujar diseños komon es un poco como eso un paso cada vez, una pincelada cada vez, hasta la cima. Creo que es por eso por lo que me gusta mi trabajo.
¿Qué es lo que le atrae tanto de la cerámica Kiyomizu? Nos sonríe al decirnos: Supongo que es debido a que cada pieza es única, a su modo, y porque los artesanos podemos vivir de la manera que nos gusta. ![](../../../common/images/mark_ni.gif)
|