Paseando por detrás del hotel, usted llegará al Valle Feliz. El nombre de este distrito de villas antiguas se lo dio el misionero A.C. Shaw. Aquí encontrará muros de piedra cubiertos de musgo y caminos empedrados. La zona está regada de rayos de sol filtrados por el espeso follaje. Quizás a usted le apetecerá pasear escuchando el trino de los pájaros.

El Hotel Kyu-Mikasa, al igual que el Hotel Manpei, nos recuerda el pasado de Karuizawa. Fue construido en madera en 1905, con un diseño totalmente occidental, y fue hasta 1970 un lugar favorito de políticos y financieros, así como de personajes de la cultura. En la actualidad, el edificio está dedicado a archivo y se encuentra abierto al público. Aún mantiene el ambiente de sus días de gloria.

Karuizawa cambió mucho tras la Segunda Guerra Mundial. En 1961, Su Alteza Imperial, el Príncipe Coronado y Doña Shoda Michiko (actualmente, Sus Majestades el Emperador y la Emperatriz de Japón) se conocieron en una cancha de tenis de Kyu-Karuizawa y se enamoraron. Esto provocó un inmediato boom de Karuizawa en Japón y atrajo a numerosos jóvenes. No tardó mucho en que muchos turistas vinieran a pasar unos días de vacaciones – para jugar al tenis y al golf, así como a esquiar y patinar en el invierno, y para hacer compras.

El área Kyu-Karuizawa Ginza, donde en su día estaban emplazados los hostales para viajeros, se ha convertido en el mayor distrito comercial de Karuizawa y está repleto de visitantes durante el verano. La calle desde la Glorieta Kyu-Karuizawa al Puente Nite-Bashi está flanqueada por boutiques, restaurantes, tiendas de recuerdos y otros establecimientos, con un total de 500 en una distancia de tan sólo 800 metros. Muchos llevan abiertos desde hace décadas. Un estudio fotográfico, llamado Tsuchi-ya, fue inaugurado en 1906, y sus paredes están decoradas con viejas fotos de gente que vino aquí escapando de los calores veraniegos. Otra tienda, Osaka-ya, vende muebles de fantasía esculpidos al estilo de Karuizawa. Este estilo se vio por primera vez en el mobiliario de las villas de occidentales y fue influido por el estilo Nikko de grabado, desarrollado en Nikko, Prefectura de Tochigi. El trabajo artesanal del esculpido atrae la admiración por su belleza.

Recientemente han abierto sus puertas unos grandes almacenes, llamados Centro Comercial Karuizawa Prince, justo en la parte sur de la Estación de Karuizawa. Son muchas las mujeres que vienen para hacer compras y pasar el día.

Karuizawa ha cambiado de forma gradual, reflejando el paso de los tiempos. Pero una cosa que no cambiará nunca es el que la gente deseará siempre venir a pasar varios días en el verano, para gozar del aire libre, la vegetación y las suaves brisas. La cultura occidental se ha fundido con la belleza natural y las tradiciones japonesas, creando un mundo donde la vida dista de ser ordinaria, un lugar de encanto para el visitante.