Los productos industriales de Japón, como los coches de lujo, el envasado de alimentos y las películas de alto rendimiento, están aprovechando la tecnología biomimética, que utiliza las estructuras y funciones extraordinarias de los organismos vivos. Esta idea de evolucionar el desarrollo tecnológico utilizando la inspiración de seres vivos y plantas para satisfacer las necesidades de los exigentes consumidores japoneses (que siempre buscan la mejor calidad), habla de la fuerza de una "nación fundada en la manufactura".

“La mariposa más hermosa del mundo” inspira el color utilizado en el chasis de un coche

   Se dice que la mariposa Morpho, que vive en Sudamérica, es "la mariposa más hermosa del mundo". El principal fabricante de vehículos motorizados de Japón, ha estado vendiendo un modelo de edición limitada y especial de un automóvil que utiliza un color de carrocería llamado "azul estructural", un color inspirado en el azul de las alas de la mariposa. Este es un modelo insignia coupé lanzado en abril de 2018 para celebrar que el fabricante ha logrado vender 500 000 coches de su marca de lujo a nivel nacional. Si bien logró un gran reconocimiento, el modelo era una edición limitada y las ventas finalizaron a principios de julio.
   El modelo adoptó el principio de "coloración estructural", inspirado en las alas de la mariposa Morpho. Aunque las alas no tienen color, su estructura refleja y enfatiza solo ciertas longitudes de onda cuando la luz brilla sobre ellas, haciéndolas brillar en azul para el ojo humano. Se han necesitado 15 años de desarrollo para crear pigmentos colorantes estructurales para uso automotriz; y si bien la sustancia en sí no tiene un color agregado, produce una intensidad abrumadora y un brillo fantástico cuando la luz se refleja en ella, lo que crea una hermosa carrocería que en verdad se destaca.

Las tapas de los envases de yogurt siguen el ejemplo de la hoja de loto

   Los principales fabricantes de alimentos y los principales fabricantes de materiales han desarrollado conjuntamente una tapa que evita que el yogurt se adhiera a la parte inferior; una tapa inspirada en la hoja de loto. La tecnología se llama "envasado repelente de líquidos". La tapa imita la forma en que las pequeñas protuberancias en la hoja de loto le permiten arrojar el agua que sale de la superficie en forma de gotas de agua que se escurren. Aunque algo de yogurt se adhiera a la tapa, inmediatamente se cae rodando como cuentas; esto significa que al abrir la tapa no tendrá yogurt pegado a ella.
   Esta tecnología tardó aproximadamente un año en desarrollarse y entró en uso práctico en febrero de 2010. En 2013, el envasado repelente de líquidos ganó el Premio de Plata en los "Premios DuPont a la Innovación de Envases", un premio internacional para envases sobresalientes de países de todo el mundo. El fabricante explicó que "esto ha sido bien recibido ya que el yogurt no se pega a la tapa, lo que hace que el producto sea más higiénico y hemos tomado en cuenta la opinión del consumidor en su desarrollo".

Enfoque en los ojos de las polillas, los cuales minimizan la reflexión de la luz

   También hay algunos productos que se han inspirado en la misma estructura irregular, pero de un insecto en lugar de una planta.
   Las polillas son en gran parte nocturnas y pueden realizar actividades con muy poca luz en la noche. En otras palabras, sus ojos son capaces de captar la luz de una manera muy eficiente. El secreto de esto son las pequeñas protuberancias en la superficie de sus ojos compuestos, la llamada "estructura del ojo de polilla". Estas protuberancias dificultan que la luz se refleje desde el ojo.
   Vamos a hacer zoom en el ojo de la polilla en una serie de tomas. En la sexta toma, las protuberancias son tan pequeñas que solo se pueden ver con un microscopio electrónico.

   Un importante fabricante químico japonés y un laboratorio en la prefectura de Kanagawa desarrollaron conjuntamente una película de plástico transparente utilizando la "estructura del ojo de polilla", que se lanzó en productos en el verano de 2013.
   Por ejemplo, a veces se usan láminas de vidrio o acrílico para enmarcar cuadros y fotografías en los museos; pero ambos reflejan la luz, lo que dificulta que muchas personas vean la obra de arte. Sin embargo, al pegar esta película en la superficie, no hay reflejo de la luz y el trabajo puede verse claramente.

   Aunque la lámina transparente sea de vidrio o acrílico, ambas reflejan la luz en las superficies frontal y trasera, lo que reduce la transmisión de luz visible a alrededor del 92 %. Si esta película se pega en la parte frontal, mejora la transmitancia a alrededor del 96 %; y si se pega tanto en la parte frontal como en la trasera, esto aumenta a alrededor del 100 %, con prácticamente toda la luz transmitida y sin reflexión. Esto es muy conocido ya que te permite tomar fotografías de pinturas, etcétera, directamente, sin tener tu propio reflejo en ellas.

   Además de los museos, esta tecnología también se está utilizando en pantallas de navegación por satélite de automóviles, etc. En el futuro habrá innumerables aplicaciones para esta tecnología, como su uso en paneles solares para ayudar a aumentar la cantidad de luz solar capturada, etc.
   La manufactura japonesa ha estado progresando en mejorar la calidad para aumentar la satisfacción del consumidor al aprender humildemente de los seres vivos y del mundo natural. La próxima innovación que sorprenderá a los consumidores de todo el mundo puede estar acechando en un lugar inesperado, justo a nuestro lado.